La Amazonia: Las 7 funciones, los 10 jinetes del apocalipsis, los 15 mitos depredadores y las 17 contradicciones del neoliberalismo capitalista

Eco. Hugo Cabieses Cubas[1]

Considero que es el momento –hace rato lo es– de, más allá de las contingencias de la coyuntura, pensar y actuar en función de tendencias generales, en el marco lógico, para aterrizar propuestas, locales y globales, que mitiguen en el corto plazo y eliminen en el largo plazo, una hecatombe planetaria, en la región Andino-Amazónica y el planeta, cuyos síntomas los sentimos diariamente con crisis múltiples y guerras absurdas por todos lados. Veamos la fórmula 7-10-15-17 del título y al final señalemos algunas propuestas viables.

No soy de los deprimidos que sostienen que los socialistas, los “progres” y los llamados “caviares” no tenemos propuestas sino puras protestas. No sólo las tenemos, sino que las hemos formulado en sendos planes de gobierno en 1990 (Plan de Gobierno de IU o Plan de Acción Inmediata[2]), 2006 (Plan de Gobierno del PS y del MNI; para las elecciones del 2006, el Acuerdo Nacional emitió un informe sobre los 31 partidos que `postularos a las elecciones titulado. Entre las páginas 116 y 126 están las propuestas del Partido Socialista y el del Movimiento Nueva Izquierda MNI está de las páginas 95 a la 102[3]), 2011 (Programa de la Gran Transformación[4]), 2021 (Plan de Gobierno de Juntos por el Perú[5]).

Aunque es verdad que las propuestas son sectoriales, las comenzamos a impulsar.  Esto como participantes en cargos del Estado en por lo menos 8 gobiernos de los últimos 34 años: Fujimori 1990-1991, Toledo 2001-2002, Humala 2011-2012, PPK 2016-2017, Vizcarra 2017-2019, Castillo 2021-2022 y dos gobiernos transitorios: Paniagua 2000-2001 y Sagasti 2020-2021.

Como es conocido, la correlación de fuerzas sociales y políticas no nos fueron favorables en el impulso total de estas propuestas y terminamos expulsados de esos gobiernos, pero… dejamos huella de eficiencia, patriotismo, honradez y visión estratégica en varios sectores de la administración pública en sus tres niveles. Está pendiente una evolución crítica y autocrítica de esta participación en los gobiernos neoliberales.

En Nuevo Perú por el Buen Vivir (NPxBV), recientemente inscrito en el JNE con 35,000 militantes y 150 comités regionales y distritales, hemos re instalado la Comisión de Programa con más de 70 inscritos de todo el paìs. La más reciente colaboración sobre estos temas programáticos son los varios artículos de Pedro Francke en Hildebrandt en sus Trece y el último de ellos aún no publicado, se titula “Un Programa Económico de Izquierda Democrática para el 2023”. En mi sub comisión sobre Amazonía y Ambiente, he presentado una propuesta que se titula “Sobre Amazonia y Delitos Ambientales”. Ricardo Soberón tiene sendas propuestas sobre coca, tráfico ilícito de drogas y seguridad. Fernando Cuadros sobre políticas de empleo y Humberto Campodónico sobre energía y petróleo. La Mocha García Naranjo sobre políticas de mujer y migraciones y José de Echave sobre minería sostenibles, etc. etc. Los que dicen que no tenemos propuestas, no saben lo que afirman…

Las 7 funciones del Bioma Andino-Amazónico

La pandemia de Inteligencia Artificial y 5G no es tan nueva – hubo 2G, 3G, ahora estamos en 4G – y ambas dos, se están asentando en el Perú en medio de una guerra geopolítica entre China y EEUU, por el control de las comunicaciones, los recursos naturales, los mercados y gentes del planeta. Ello nos obliga a reflexionar sobre las siete funciones que tiene nuestra región andino-amazónica de las que he escrito antes[6], a saber:

  1. es el pulmón de buena parte del planeta ya que sus árboles y ríos producen oxígeno O2;
  2. es el riñón por absorber y producir CO2, uno de los principales gases de efecto invernadero GEI, al concentrar la mayor parte de los bosques del planeta;
  3. es el aguatero de al menos el 20% del agua dulce del mundo que convierten las nubes de este a oeste en verdaderos ríos voladores para irrigar las costas del Perú, Ecuador, Chile y hasta las pampas argentinas y uruguayas [7];
  4. es la equilibradora del clima, su sistema de aire acondicionado;
  5. es la alacena alimentaria de miles de comunidades urbanas y rurales y de millones de personas;
  6. es la despensa de la biodiversidad con más del 20% de las plantas, animales y minerales del mundo; y,
  7. es el botiquín y caja de recuerdos de los conocimientos ancestrales de los pueblos indígenas y no indígenas sobre principios activos de plantas y animales para curar enfermedades.

En resumen, como sostiene Roger Rumrrill en un libro liminal del 2008[8], la región andino-amazónica de nuestra Abya Yala, es la reserva estratégica de América del Sur para el Buen Vivir en el Siglo XXI[9]. La tesis central de su libro es: “Si el advenimiento de la modernidad solo fue posible luego de los cambios y transformaciones de la Edad Media, paralizada durante diez largos siglos por su asunción dogmática de la fe y la razón, la postmodernidad amazónica desde la cosmovisión amazónica es, igualmente, la puesta en cuestión de todos los extravíos y excesos de la modernidad en la economía, la cultura, la política y sobre todo en su voluptuosa e insaciable capacidad destructora de la Madre Naturaleza”. Y, si no llegamos al “punto de no retorno” en la deforestación y combatimos a los “Diez Jinetes del Apocalipsis[10], se trata de la región que nos salvará de una hecatombe planetaria. 

Lo de la hecatombe es lo que está sucediendo con el principal factor del cambio climático y calentamiento global, es decir la generación de GEI principalmente CO2 y metano, pero todos sabemos que es el modelo de producción y de provisión de energía basado en combustibles fósiles, así como el estilo de consumo no sostenible, que son los tres basamentos del capitalismo y socialismo autoritario …. estamos donde estamos. Por ello, mi tesis con la que coinciden varios, es que «volver a la normalidad», a la «nueva normalidad», a la «nueva convivencia» y, desde el Foro Económico Mundial FEM-WEF, al «gran reinicio»[11], no resolverá los problemas que tenemos, sino que los dispersará, profundizará y serán parte de la realidad tanática y corrupta en la que vivimos en el Perú desde que en 1993 se nos impuso la fraudulenta fuji-constitución.

Lamentablemente, en los largos tres meses de cuarentena y 4 años de pandemia con sus mutaciones – como la viruela del mono -, los gobiernos no han actuado con coherencia, criterio, lógica y sentido común al aplicar sus medidas, sin diagnósticos certeros y cual “pilotos de bombardero”, además de no hacerlo con transparencia, ética mínima y sentido de equidad diferenciada, social y territorialmente. Con justicia, la población exige que el Gobierno debería tener otra lógica, la de los de abajo y adentro, la de las mayorías, no la del neoliberalismo, depredador y excluyente que incrementa las desigualdades.

Debería tener otros criterios, los de los trabajadores, los agricultores y los pueblos indígenas, no los de los dueños del Perú, los de los más ricos. Debería tener otro sentido común, el del valor de uso sostenible de los recursos naturales (agua, bosques, energía y biodiversidad), en lugar del valor de cambio (precios y mercado) del neoliberalismo depredador y concentrador de ingresos. Pero, lamentablemente, creo que no le podemos pedirle peras al olmo: como el emperador en Estados Unidos, el neoliberalismo en el Perú … ha quedado desnudo.

Los 10 Jinetes del apocalipsis y el “punto de no retorno”

Las advertencias recientes de las Universidad de la ONU en el “Informe de Riesgos de Desastres Interconectados 2023” advierte sobre seis “puntos de inflexión» o áreas de preocupación en el planeta a propósito del cambio climático, en su informe del 25 de octubre [12].

  1. las extinciones aceleradas,
  2. el agotamiento del agua subterránea,
  3. el derretimiento de los glaciares de montaña,
  4. la contaminación espacial,
  5. el calor insoportable y,
  6. un futuro que no se puede asegurar.

A ello, lamentablemente, debemos añadir los “12 jinetes del Apocalipsis” mencionados, no sólo en el Perú sino en los 8 países que componen del Bioma Andino Amazónico, que hemos señalado en otros escritos y aquí mismo:

  1. las economías ilícitas del crimen organizado no sólo de drogas sino otros delitos asociados (tala ilegal, minería metálica y no metálica aluvial, tráfico de flora y fauna, tráfico de tierras, trata de personas, derrames de petróleo y relaves mineros, tráfico de armas, lavado de activos, etc.) que depredan miles de hectáreas de bosques y envenenan decenas de ríos y pervierten culturas autóctonas;
  2. la minería-petróleo-gas o “excrementos del diablo”, que envenenan ríos, depredan bosques, no contribuyen en nada al combate contra el Cambio Climático y tampoco a conseguir las 17 metas del Desarrollo Sostenible;
  3. el cultivo y la producción café y cacao para la exportación, realizado de manera extensiva, que en los último 40 años han depredado cientos de miles de hectáreas de bosques y malogrado tierras;
  4. la palma aceitera y su transformación para la exportación despojo de tierras a comunidades de pueblos indígenas y agricultores, con depredación de bosques y empobrecimiento de tierras;
  5. la soya extensiva de exportación para alimentos de animales principalmente en Bolivia y Brasil;
  6. la caña de azúcar para etanol y supuestamente energías renovables con depredación extensiva de bosques principalmente en Brasil y Colombia;
  7. la ganadería extensiva, principalmente bovina, que pastan, pesan, pisan y contaminan con metano (pedos), depredando miles de hectáreas de bosques y empobrecimiento de suelos en Brasil, Colombia y Bolivia;
  8. la tala legal e ilegal de bosques para maderas y derivados de exportación y consumo interno, depredando miles de has de bosques en los 8 países del Bioma;
  9. los esquemas REDD (reducción de emisiones por degradación y deforestación y los canjes de deuda por naturaleza que favorecen a los “piratas del carbono”, a los gobiernos y no a las comunidades, que además no detienen la deforestación, ponen en peligro los títulos de los territorios y no contribuyen a la gobernanza territorial; y,
  10. la construcción de infraestructura carretera, caminos, aeropuertos,  el blanco, el rojo, el negro y el amarillo bayo, ferrocarriles, represas y dragado de ríos, bajo el síndrome CAFE (Cemento, Arena, Fierro y Equipos), que depredan miles de hectáreas de bosques.

El Apocalipsis ya no tiene los 4 jinetes – el blanco, el rojo, el negro y el amarillo bayo – que vienen a destruir la tierra, como dice el capítulo 4 de este del Nuevo Testamento, sino nada menos que 10. La lucha contra ellos deberá ser titánica e implacable. Los “puntos de inflexión» se alcanzan cuando un sistema ya no es capaz de amortiguar los riesgos y desempeñar sus funciones, y van más allá de los ámbitos individuales del clima, los ecosistemas, la sociedad y la tecnología.

En esto estamos y, en mi opinión, la única manera de encararlos, sin una guerra destructiva y salvaje en la que estamos, es a través de una estrategia planetaria de Descrecimiento Sostenible Asimétrico, en la que los países “desarrollados” deben parar de crecer e impulsar guerras y los países como los nuestros… crecer sosteniblemente, que no es otra cosa que hacerlo sin destruir la naturaleza, como lo han hecho los pueblos indígenas duran te milenios.

Los bosques y el “punto de no retorno”

La pérdida de bosques en el Bioma Andino- Amazónico por efecto de las actividades de los 10 Jinetes del Apocalipsis entre 2000 y 2020 ha sido de 542,581 Km2, es decir el 8.7% con relación al bosque que existía en el 2000 que era de 6´635,924 Km2. Ello, según la Red Amazónica de Información Socioambiental Georreferenciada (RAISG), pero según los científicos, con el brasileño Carlos Nobre a la cabeza, el punto de no retorno sería del 20 al 25%: “si las tasas de deforestación en toda la cuenca exceden del 20 al 25 por ciento del área forestal, conduciría a un proceso irreversible de sabanización. A este paso, podríamos alcanzar el punto de inflexión dentro de 20 a 30 años”[13]

Llegar a este 20 o 25% significaría que, antes del 2050, el inmenso territorio boscoso, el de los ensueños, aventuras, películas y novelas, estaría sabanizado, inundado, parcialmente desértico e inútil como productor de oxígeno, agua, biodiversidad, fuente alimentaria, botiquín ancestral y equilibrio climático del planeta. Sobre la base de decenas de declaraciones, convenios, tratados y compromisos nacionales e internacionales suscritos anteriormente, los presidentes declaran sobre la necesidad de no llegar a este punto y para ello se comprometen a recurrir, consultar y permitir la participación de la sociedad civil del Bioma, incluyendo a los pueblos indígenas, agricultores, afrodescendientes, mujeres y jóvenes.

Los 15 mitos con relación al extractivismo depredador

Las actividades extractivas en general no son renovables, su objeto no es la reproducción del recurso utilizado sino las utilidades de las empresas que agotan y no consideran los ritmos de regeneración natural. Estas actividades son no renovables, se requiere millones de años para su formación, dejan hoyos vacíos, pasivos ambientales y afectan las fuentes agua. Son extracciones en grandes volúmenes destinados para ser exportados y, en sentido amplio, pueden ser:

  1. mineral metálico (subsuelo) y no metálica (superficial);
  2. hidrocarburos fósiles, petróleo, gas y carbón;
  3. vegetal: árboles, quina, caucho, chicle, oleaginosas, tintes, medicinales, resinas, semillas, frutos y raíces; agricultura migratoria de tumba y quema; industrial mono-productiva con químicos y Organismo Genéticamente Modificados (OGM); y,
  4. animal: ganadería grande y pequeña.

En la minería, el petróleo y el gas los mitos son los siguientes[14]:  Mito 1: Los que se oponen son fundamentalistas y están en contra de todo tipo de inversión en recursos naturales. Mito 2: Su explotación a como dé lugar es un “motor de desarrollo‟ e impulsa la economía nacional. Mito 3: Genera empleo y crecimiento económico local. Mito 4: Crea muchos puestos de trabajo indirectos. Mito 5: Se instala en zonas postergadas, crea un circulo virtuoso, genera desarrollo y eleva el nivel de vida de la población. Mito 6. Los beneficios se quedan en los países de donde se extraen y las empresas contribuyen con el pago de diferentes impuestos en el desarrollo del país. Mito 7: Puede ser limpia, no contamina el ambiente, se puede hacer sin riesgos ambientales y existe soluciones técnicas para cada problema ambiental.

Paro hay más: Mito 8: Los emprendimientos cumplen con exigentes regulaciones ambientales y son las únicas actividades regulada por leyes ambientales. Mito 9: Ningún proyecto se hace sin el consentimiento previo de las comunidades involucradas. Mito 10: Estas actividades extractivas fortalecen el tejido social, reducen la migración y la descomposición de las comunidades. Mito 11: Las empresas transnacionales garantizan transparencia y libertad de opinión en cuanto a la evaluación de sus actividades. Mito 12: Cada país es autónomo y soberano en sus relaciones con empresas transnacionales, que respetan el marco legal de los países en donde operan. Mito 13. Las empresas transnacionales se comportan con responsabilidad social empresarial, robusteciendo el tejido socioeconómico de la zona. Mito 14: Los que se oponen a la inversión a gran escala, nacional o trasnacional, no tienen alternativas de desarrollo. Mito 15: América tiene un destino mineral y de recursos naturales: sin desarrollo y crecimiento, no hay futuro para nuestras sociedades.

Hagamos un cuadro en el que estén estos mitos en una columna y en la otra cuál es la realidad en nuestro país en las diversas actividades extractivas, que son variadas y se trata de toda actividad primaria de origen mineral, vegetal, animal o de productos derivados y/o asociados que difiere de la actividad agrícola, pesquera e industrial.

MITOS¿CUÁL ES LA REALIDAD?
Mito 1Es inexacto: se oponen a las inversiones que se impulsan sin responsabilidad social y ambiental exigen que se apliquen los 10 Principios del ICMM.
Mito 2No es ningún “MOTOR” del desarrollo local y nacional. Más bien impulsa la pobreza, viola derechos laborales, está en contra de las comunidades y genera relaves y basura de todo tipo.
Mito 3General pocos empleos locales y el crecimiento económico de los trabajadores y sus familias brilla por su ausencia en el corto, mediano y largo plazo
Mito 4Crea algunos puestos de trabajo indirectos de carácter terciario, violando derechos laborales adquiridos y favoreciendo a las empresas con las que terceriza.
Mito 5Invierten en zonas postergadas, crea círculos viciosos y desploma el nivel de vida de la población desligándola del campo y
Mito 6Los beneficios de empresas nacionales e internacionales se van a los paraísos fiscales, se concentran en unos pocos, aceptan y promuevan la evasión-elusión y contribuyen muy poco con desarrollo del país.
Mito 7Son actividades sucias, dejan relaves y derrames, depredan recursos, impactan sobre la biodiversidad, agreden el ambiente, deforestan bosques y las posibles soluciones técnicas para mitigar los riesgos no son aplicadas.
Mito 8Normalmente incumplen con las disposiciones ambientales, realizan cabildeo en el Congreso y con el Ejecutivo para bajar las vallas ambientales y no pagan las multas por incumplimiento de normas, recurriendo a acciones de amparo.
Mito 9La elaboración de los proyectos y los Estudios de Impacto Ambiental EIA no son vinculantes y no son consultados previamente, sino se entrega a las comunidades sin retroalimentación. No existen Evaluaciones Ambientales Estratégicas EAE.
Mito 10En casi todos los casos, debilitan a las comunidades, introducen elementos de disociación de las mismas, aumentan la migración hacia otros territorios y la descomposición moral de las comunidades.
Mito 11Sobre todo las extranjeras, no favorecen la transparencia y menos aún libertad de opinión, no comparten la información necesaria para ello y más bien castigan con despidos y sanciones de todo tipo a los que opinan diferente.
Mito 12Las empresas transnacionales no solo irrespetan el marco legal de los países, sino que hacen cabildeo para lograr leyes favorables y recuraren al CIADI cuando hay controversias,
Mito 13Las transnacionales y las nacionales incumplen con los 10 principios que del Centro Internacional de Minera Metálica ICMM así como de los marcos regulatorio internacionales que existen actualmente.
Mito 14No es verdad. Los que se oponen lo hacen son relación a las empresas que invierten sin regulaciones y violando sus propias leyes de convivencia y responsabilidad socioambiental y si existen y se han aplicado en su momento propuestas alternativas de desarrollo sostenibles.
Mito 15Nuestros países NO son mineros solamente, sino marítimos, agropecuarios, boscosos, biodiversos y multiculturales. Lo han sido desde hace milenios y el llamado “desarrollo con crecimiento” hasta ahora ha sido una quimera.
  

En el Perú se permite y alienta todo lo mencionado, las autoridades ambientales se ponen de perfil, el Congreso legisla a favor de los depredadores. Las empresas en general no cumplen con los 10 principios de responsabilidad socio ambiental del Centro Internacional de Minería Metálica ICMM del 2003[15] de la que son firmantes sobre: negocio ético, toma de decisiones, derechos humanos, gestión de riesgos, salud y seguridad, desempeño medioambiental, conservación de la biodiversidad, producción responsable, desempeño social y vinculación con actores interesados.

En el 2016, un empresario minero de Yanacocha con el que conversé en Cajamarca me respondió lo siguiente, cuando revisamos punto por punto los 10 principios: “nosotros no somos una beneficencia sino una empresa que busca el máximo de utilidades; es tu Estado el que debe hacerlas cumplir”. Le respondí que sus agentes en Lima se pasean por los despachos de los congresistas y ministros para sacar leyes a favor, a fin de bajar las vallas ambientales y laborales. Hubo silencio.

Las empresas peruanas en general y minero-petroleras en particular, no cumplen con estos principios, aunque dicen que lo hacen y tampoco cumplen con los Principios Rectores Sobre las Empresas y los Derechos Humanos (UNGP) de la ONU[16] y, menos aún, con la Guía de la OCDE de Debida Diligencia para una Conducta Empresarial Responsable[17], que son referentes internacionales claves para el respeto de los derechos humanos y el ambiente por parte de las empresas.

Hasta la República Popular China tiene sus Lineamientos Sobre Responsabilidad Social en las Inversiones Mineras Chinas en el Extranjero de la CCMC[18]. Ojo con estos últimos en relación con sus múltiples y millonarias inversiones en el Perú, particularmente con el Mega Puerto de Chancay en construcción. Tenemos la paradoja de que mientras los chinos suben su vallas ambientales y laborales, el Perú las baja porque …. lo que importa son las inversiones y la “permisología” que odian es la principal valla.

Las 17 contradicciones del capitalismo

Según el economista inglés post marxista David Harvey, catedrático de Antropología y Geografía en la City University de Nueva York CUNY y miembro del Miliband Fellow de la London School of Economics, en un libro del 2011 (publicado en español en el 2014) [19], largamente citado por los que aún creemos en los sueños, en su parte medular sostiene que: Podemos ahora comprender mejor dos cosas. En primer lugar, entendemos con mayor claridad hasta qué punto es importante que el capital se arrogue el manto de la responsabilidad medioambiental para fundamentar legítimamente en el futuro el ecologismo de las grandes empresas a fin de que estas puedan (1) dominar los discursos ecológicos, esto es, definir la naturaleza en sus propios términos, generalmente monetizados con la ayuda del análisis de coste-beneficio, así́ como (2) intentar gestionar las contradicciones existentes entre esta y el capital de acuerdo con sus propios intereses de clase. En segundo lugar, cuanto más dominante se muestre el motor económico del capital en las diversas formaciones sociales que constituyen el capitalismo mundial, más presentes deben estar las reglas que rigen la relación metabólica del capital con la naturaleza en los discursos, la política y las políticas públicas.”

 

Este libro es de lectura y estudio recomendable, sobre todo por dilucidar, en base a los clásicos y posteriores desarrolladores/as, las 17 contradicciones del capitalismo contemporáneo dividiéndolas así:

a) Contradicciones fundamentales:

1. Valor de uso y valor de cambio.

    2. El valor social del trabajo y su representación mediante el dinero.

    3. La propiedad privada y el Estado capitalista.

    4. Apropiación privada y riqueza común.

    5. Capital y trabajo.

    6. ¿El capital es una cosa o un proceso?

    7. La contradictoria unidad entre producción y realización.

    b) Contradicciones cambiantes:

    8. Tecnología, trabajo y disponibilidad humana.

    9. Divisiones del trabajo.

    10. Monopolio y competencia: centralización y descentralización.

    11. Desarrollos geográficos desiguales y producción de espacio.

    12. Disparidades de renta y riqueza.

    13. Reproducción social.

    14. Libertad y sometimiento.

    c) Contradicciones peligrosas:

    15. El crecimiento exponencial y acumulativo sin fin.

    16. La relación del capital con la naturaleza.

    17. La rebelión de la naturaleza humana: la alienación universal.

    Con este marco de análisis Harvey señala que: “Lo que es diferente en esta ocasión es que nos encontramos en un punto de inflexión crucial de la tasa de crecimiento exponencial de la actividad capitalista, la cual está teniendo un impacto igualmente exponencial sobre los niveles de estrés y riesgo medioambientales en el seno de la ecología del capital, que insiste ante todo en mercantilizar, privatizar e incorporar cada vez más aspectos de nuestro mundo vital (incluidas las propias formas de vida) a sus circuitos.”

    Sigue Harvey informando esto: “Incluso las identificaciones genéticas se reivindican ahora como propiedad privada. Asimismo, ello lleva a una intensificación de las presiones, de manera muy destacada en áreas como el cambio climático, la perdida de diversidad de los hábitats, la imprevisible y trastabillante capacidad de garantizar la seguridad alimentaria y la protección adecuada frente a las nuevas enfermedades. Me atrevería a asegurar que hay indicios claros de que se están produciendo una propagación cancerosa y una degradación de la calidad del ecosistema capitalista cada vez mayores. Buena parte de ello está asociado, asimismo, al fenómeno de la rápida urbanización y la construcción de entornos urbanizados (a menudo denominados «segunda naturaleza») de muy baja calidad (este ha sido el caso concretamente de Asia durante los últimos años).”

    Diagnóstico y propuestas

    Al menos desde el 2016 si no es desde antes en el Perú estamos sufriendo cinco plagas:

    1. La pandemia mundial del COVID 19 y otras plagas, que tienen su origen en la “zoonosis” por deforestación de zonas tropicales y contagio de animales silvestres, que nos acosa, enferma y mata.
    2. El neoliberalismo extractivista que como ideología, desde hace años también mata gentes, culturas, instituciones y recursos naturales.
    3. El cambio climático provocado por el “modelo” mencionado y los GEI basados en la quema de combustibles fósiles, el uso excesivo de carne de vaca y la deforestación de bosques, que mata gente, instituciones, culturas y suelta sus virus hacia los seres humanos.
    4. Las amenazas y realidades de las guerras de todo tipo entre las que la de Ukrania-Rusia y de Israel contra el pueblo Palestino, repercute sobre la economía, la sociedad y las culturas.
    5. La crisis sistémica de DESGLOBALIZACIÓN, DESDOLARIZACIÓN y DESPOBLACIÓN – las 3D -, por lo que es de vida o muerte plantear alternativas con una racionalidad diferente.

    Con relación al neoliberalismo tenemos lo siguiente:

    1. NO es una apuesta económica-financiera, sino una imposición ideológica de los defensores del capitalismo extractivo.
    2. El “desarrollo sustentable o sostenible” es un concepto impuesto desde fuera para ponerle “rostro humano y verde” al capitalismo.
    3. Desde el “Consenso de Washington” y la “TINA” – There Is Not Alternative) de Theacher y Reagan en 1979, esta propuesta ideológica ha carcomido el cerebro y el corazón de todas y todos.
    4. Esta propuesta no ha sido de desarrollo y menos aún sustentable: la pobreza, concentración de ingresos y exclusión es cada vez mayor.
    5. La lucha de los pueblos contra el neoliberalismo ideológico en ALC, ha dado algunos pasos durante los 20 años del siglo XXI, pero los “progresismos” han devenido en avaladores del “capitalismo verde”.
    6. Ello, en un escenario internacional conflictivo de guerras, distópico propio del Antropoceno.
    7. Se trata de la Era del Capitaloceno, del Plasticeno en los mares y la tabla de salvación, es la Reserva Estratégica andino amazónica.
    8. Por lo menos desde el 2016, en el Perú de hoy estamos atravesando por una grave “Crisis de Estado”, no sólo de régimen o de gabinete.
    9. En estas crisis, tal como puede leerse en Lenin, Rosa Luxemburgo, Gramsci y otros, los de arriba no se ponen de acuerdo aún para gobernar e imponer su “modelo” ideológico neoliberal y seguir robando.
    10. Pero también, los de abajo aún están dispersos y sin unidad como para constituirse en alternativas.
    11. Las representaciones políticas de derecha, centro e izquierda están en cuestión y la democracia representativa también.
    12. Desde el 2022, luego de cuatro presidentes – varios de ellos presos o procesados -, más de setenta muertos, 1,600 heridos y grave crisis institucional se impuso la dupla Boluarte/Otoarola.
    13. Se trata de régimen dictatorial perverso, mafioso y anticonstitucional de la dupla aliada con las FFAA y un congreso fuji-apro-cerronista-acuñista, totalmente desprestigiado nacional e internacionalmente.

    Mitos a disolver y propuestas a impulsar

    La geografía, la ecología, la hidrología, el clima, las culturas y la demografía exigen atender la diversidad y variabilidad propias de nuestro país, apuntando a convertirlo en una potencia gastronómica y, a la base para ello, son los indígenas, los bosquesinos, los campesinos, los pescadores artesanales, en resumen, las unidades familiares que proporcionan actualmente el 70% de los bienes perecibles que los peruanos consumimos.

    En el Perú reciente y protestón, casi todas las fuerzas políticas y las estructuras del Estado están en proceso destituyente desde fines del 2016[20] y, para hacer viable el país en marcha hacia un nuevo pacto social o proceso constituyente, es necesario disolver al menos los siguientes 10 mitos que son, desde hace 3 décadas, sentido común en la población. Estos 10 principios míticos son inamovibles entre los poderes fácticos  neoliberales del país, como la Confederación Nacional de Instituciones Empresariales Privadas CONFIEP, los mineros de la Sociedad Nacional de Minería y Petróleo SNMP, la mayoría de los medios de comunicación (particularmente El Comercio y Expreso), la Derecha Bruta y Achorada DBA (fujiaprismo, iglesia conservadora, Opus Dei, con mis hijos no te metas, etc.) y también entre la derecha dizque democrática DDD (liberales en lo económico pero autoritarios en lo político).

    1) Se sostiene que el Perú es un país minero-petrolero-gasífero extractivista, pero la geografía y la demografía nos dicen que somos marítimos, forestales, agropecuarios, lacustres-fluviales, biodiverso con áreas naturales protegidas ANP, en ese orden y… también minero-petrolero-gasífero, pero para dejar de serlo por necesidad de agotamiento de reservas o desplome de precios lo más rápido que podamos.

    2) Se sostiene que para superar la pobreza y la exclusión debe haber un crecimiento continuado del PBI, pero según todos los analistas serios, actualmente el agua, la tierra, los bosques y el clima ya no dan para este crecimiento continuado, en pleno antropoceno hacia la sexta extinción.

    3) Se sostiene que es el síndrome CAFE (cemento, arena, fierro y equipos, más aún con C de Coimas), lo que debe primar en las inversiones públicas y privadas, es decir puro hardware (obras) sin software (gestión y manejo adecuado sostenible), lo que en realidad sirve casi exclusivamente para fomentar la corrupción, el cabildeo mafioso y la consigna de “roba pero hace obras”.

    4) Se sostiene que el neoliberalismo es una propuesta económico-financiera-comercial, pero en la realidad se trata principalmente de un programa ideológico-cultural-geopolítico que ha ganado el corazón y la mente de las personas… por ahora.

    5) Se sostiene que, gracias a la exportación y la articulación a la globalización en marcha, superaremos la exclusión de los pobres y lograremos la competitividad-productividad, pero los últimos 40 años se ha demostrado que esta quimera sacrifica los mercados locales, las regiones, la soberanía alimentaria, destruye los recursos naturales – agua, glaciares y bosques – y aumenta las desigualdades.

    6) Se sostiene que el agua, los bosques, la biodiversidad y la Amazonía son bienes transables e infinitos, pero este mito es falso e irresponsable en un mundo con cambios climáticos antrópicos y con enormes desastres de este mismo origen, como los incendios forestales, los impactos del Niño y la Niña, los friajes, las sequías, etc. Los desastres no son “naturales” como dicen Trump, Bolsonaro y Milei, sino producto de un modelo productivo y de consumo que resulta insostenible.

    7) Se sostiene que los pueblos indígenas originarios, los mestizos y los indignados de diferentes clases no pueden ni deben gobernar, pero estos sectores demuestran todos los días, desde abajo y adentro, que se auto gobiernan mejor de los occidentales y … en relación armónica con la naturaleza [21].

    8) Se sostiene que el territorio y sus recursos deben venderse y no se deben ni se pueden ordenar porque ello inhibe las inversiones, la competitividad y la productividad, pero es todo lo contrario y el ordenamiento del territorio es lo que hemos hecho desde hace milenios (andenerías, montículos de terra preta, Caral, Saywite, etc.,)

    9) Se sostiene que la diversificación productiva es una propuesta de los comunistas-ecologistas para eliminar la competitividad y productividad, pero nada es más falso en un país que busca ser una potencia gastronómica (peruanicemos la globalización ha dicho el cocinero Gastón Acurio[22]), basado en la agricultura familiar y el manejo responsable y sostenible de las actividades productivas, incluyendo las extractivas, siempre y cuando respeten sus propios principios, como los del Consejo Internacional de Minería y Metalurgia que firmaron en el 2003 [23].

    10) Se sostiene, aunque no se reconozca, que los “malos y corruptos” son más en nuestro país, frente a los cuales no podemos hacer nada o muy poco. Se trata de un mito que se ha convertido en sentido común, pero la demografía y las ganas de luchar y resistir no demuestran que sea así. Si bien es verdad que estamos en un país tipo FID, fraccionado en Formal, Informal y Delictivo[24], también es cierto que existen fuerzas nuevas y antiguas que quieran que el Perú no sea de los “podridos, congelados e incendiarios” en el decir del historiador Jorge Basadre hace más de 70 años[25]

    Se trata de DISOLVER los mitos mencionados y de no darle la espalda a los problemas centrales del país como son la corrupción estructural y cotidiana, la democracia sustantiva y participativa, la persistencia del neoliberalismo extractivista, la porfiada búsqueda de mayoría electoral –casi siempre precaria e inestable–, pero sin hegemonía político-ideológica a lo Antonio Gramsci  y continuar con el modelo anterior pero con mejor reparto de la renta extractivista, para la reelección permanente de sus caudillos, como ha sucedido con los llamados gobiernos progresistas de Nuestra América, a los derechos de los pueblos indígenas, de los trabajadores, de los hombres, mujeres y jóvenes que luchan por sus territorios y en defensa de sus recursos naturales, principalmente en la Amazonía y la Orinoquía, etc.[26]

    Los mitos mencionados y probablemente otros más, se dan en un momento crucial para el Perú que, en los últimos 50 años ha transitado por al menos cuatro re-estructuraciones:

    1. 1968-1975 con Velasco Alvarado que dio al traste con la oligarquía terrateniente minero-exportadora, realizó la reforma agraria y dispuso el rol preeminente del Estado y la planificación indicativa;
    2. 1979-1982 con Morales y Belaúnde que promulgaron la constitución de 1979 para afirmar la democracia representativa, el mlodelo primario exportados y la economía social de mercado, que dé social tenía poco;
    3. 1992-2000 con Alberto Fujimori que nos impuso el neoliberalismo salvaje y corrupto, promulgó la constitución fraudulenta de 1993, privatizó las empresas estatales, destruyó la planificación indicativa e impulsó la informalidad y el crimen organizado; y,
    4. 2016-2020 PPK que intentó darle bríos al modelo primario exportador, privatizando lo poco que quedaba y provocó el caos institucional, de la mano con la hija de Fujimori en el Congreso y … fue destituido por corrupto.

    En 2017-2019 Martín Vizcarra asumió el cargo por vacancia de PPK, convocando a referéndum por reformas políticas, sin tocar el capítulo económico, luego por el inepto y corrupto Pedro Castillo 2021-2022 quien ganó las elecciones del 2021 en alianza con el no menos corrupto Perú Libre, para terminar con la matadora Dina Boluarte 2022-2024 que asumió luego del auto golpe y golpe matador de la democracia restringida, cuya clasificación es de Alianza Corrupta Autoritaria en el Poder ACAP y que con más de cincuenta modificaciones a la constitución de 1993, sin referéndum, está consolidando el “modelo” antes de irse en el 2026.

    Actualmente el pueblo está en las calles, carreteras y valles. No se ha dejado engatusar con la quimera de la competitividad y la productividad de un “modelo” mafioso extractivista salvaje y cutrero que se hizo principio constitucional y sentido común desde la Constitución fujimorista de 1993

    Hacia un nuevo pacto social con propuestas

    La plaga del coronavirus y sus derivados, que nos acosa con muertos, enfermos y desatendidos, a lo que se suma la grave crisis económica, productiva, fiscal-financiera, de empleo, pobreza, ambiental, energética, de escasez alimentaria e inflacionaria, no parece tener fin: por primera vez, la economía y la política van de la mano. En buena medida, cada fenómeno es consecuencia del modelo económico, sociopolítico y cultural que se ha venido imponiendo y aplicando en el país desde los años noventa: la privatización de empresas estratégicas, los servicios básicos y la corrupción pública y privada asociada a ello, la imprevisión del Estado y de los sectores empresariales a los que más les interesa la economía que la vida de las personas.

    Los temas centrales para una agenda en el proceso de construcción de un Nuevo Pacto Social Constitucional NPSC para encarar una problemática tan compleja y multidisciplinaria, consideramos que deberían ser al menos las siguientes orientaciones y políticas para la acción:

    1. Impulsar un desarrollo a escala humana y de la naturaleza, con cambios radicales en los patrones de consumo, producción, energético y de uso sostenible de los recursos naturales (principalmente agua y bosques).
    2. Observar y afrontar el proceso internacional que se desarrolla hace varios años y que se ha materializado en la desglobalización, desdolarización y despoblación – las 3D – a escala mundial, en donde la hegemonía de los Estados Unidos y Europa está en declive frente al fortalecimiento del eje China-Rusia-India, por cuya razón en el Perú debemos mirar a los mercados internos y de la región, dejando de seguir apostando exageradamente por los mercados externos, particularmente de nuestras materias primas. Por lo que, en última instancia, debemos apuntar hacia una estrategia de acumulación y desarrollo guiada por los principios de autodeterminación, autosuficiencia y autocentramiento, así como ponerle el ojo a los impactos del mega puerto de Chancay y el de Corìo.
    3. Enfrentar como primera prioridad a las empresas transnacionales que, como hemos postulado, producen mercancías que dan lugar a problemas que van desde la generación indirecta de virus y pandemias, pasando por el maltrato de animales, deforestación y migración de campesinos desde su lugar de origen, hasta el agravamiento del cambio climático.
    4. Aprovechando el puerto de Chancay, proteger una zona Marítima-Costeña-Andino-Amazónica natural, manejada sosteniblemente desde las comunidades por los pueblos y culturas de esas zonas y no desde las transnacionales o la burocracia estatal, a fin de impulsar propuestas de Desarrollo Integral Territorial Sostenible (DITS), con los pueblos y autoridades locales, con estrategias sociales, políticas, institucionales, medio-ambientales y tècnicas, de Zonificación Ecológica-Económica y Ordenamiento Territorial (ZEE-OT).
    5. Cambiar los patrones de consumo, producción y energéticos, transitando hacia un post-extractivismo sustentado en la protección y uso racional de los recursos naturales, cambio del patrón energético basado en combustibles fósiles por energías renovables a fin de disminuir los gases de efecto invernadero (GEI) y el calentamiento global.
    6. Oponerse a la elaboración y ejecución de megaproyectos carreteros, hidroviales, energéticos, hidrocarburíferos, mega monocultivos, mega proyectos mineros, minería artesanal-ilegal del oro aluvial, etc. que no estén sustentados en consulta previa con los afectados, proporcionando información transparente y promoviendo la participación democrática en la ejecución de Estudios de Impacto Ambiental (EIA) y Evaluaciones Ambientales Estratégicas (EAE) independientes y, eventualmente, que los gobiernos y/o las empresas transnacionales paguen por dejar de extraer determinados recursos naturales de nuestras tierras, especialmente si se trata de reservas nacionales (pensamos en el caso del Yasuní en Ecuador, que desafortunadamente fracasó).
    7. Priorizar la pequeña y mediana producción familiar agro-silvo-pastoril, el manejo comunitario de bosques y la protección sostenible de los recursos ictiológicos por pequeños pescadores, así como detener el retorno a la latifundización de las tierras para biocombustibles, concesiones diversas y macro-producciones para la exportación de productos ajenos a la biodiversidad andino-amazónica.
    8. Orientar la producción agropecuaria, boscosa e ictiológica hacia la soberanía alimentaria a través de la ampliación de los mercados locales y regionales, protegiendo y ensanchando las fuentes hídricas y su uso racional contra el estrés hídrico, lo que implica proteger las fuentes de agua, elevando las vallas ambientales para los proyectos mineros, petroleros y de otra índole.
    9. Construir redes comunitarias de solidaridad en defensa de los derechos humanos, los territorios y las plantas maestras de los pueblos indígenas, como la hoja de coca, ayahuasca y otras, reconociendo la pluriculturalidad de nuestras sociedades y el rescate de los conocimientos ancestrales para la mitigación y adaptación al cambio climático.
    10. Impulsar programas productivos y sociales sostenibles para combatir las actividades ilícitas de drogas, tala ilegal, minería informal, biopiratería, trata de personas, contrabando, etc., asentadas en las fronteras y el interior del país, generalmente asociadas al neoliberalismo globalizado y al extractivismo, encaramiento que no debe hacerse con militarización de los territorios andino-amazónicos, instalación de bases policial-militares y criminalización de los movimientos bajo el pretexto de la lucha contra el crimen organizado.
    11. Desarrollar, ampliar y/o fortalecer los programas de educación que dispongan franjas de formación en los críticos campos del cambio climático, la producción racional, el consumo benigno, el uso excesivo de energía, la problemática de los desperdicios y el reciclaje, entre otros. Para ello se debe disponer, al margen de un profesorado bien preparado y de seminarios específicos sobre la materia, de una multiplicidad de videos y películas sobre cada uno de esos temas, los que deben acompañarse con visitas guiadas a los basurales y ríos de nuestras principales ciudades (incluyendo, de ser posible, el lago Titicaca), así como una que otra Reserva Nacional.
    12. Finalmente, y no por ello lo menos importante, es el rol que debe desempeñar el Ministerio del Ambiente, al que se le debe apoyar financiera y políticamente para que pueda ejercer un mayor protagonismo, empoderamiento y alcance en el complejo tema que debería contribuir a resolver. Hoy en día es mínima la fiscalización que ejerce frente a los multifacéticos problemas medioambientales. Cuántos casos de contaminación quedan sin ser enfrentados, comenzando con la derivada de las fábricas y medios de transporte, pasando por los desechos y disposición de las aguas servidas de las plantas productoras, hasta llegar a la explotación forestal y minero-petrolera de las corporaciones transnacionales, ahora solo concentradas en parte de los sectores que ocupan las empresas informales.

    La obvia decadencia del Modelo de Acumulación-Producción-Consumo-Energía (MAPCE) actual, expresado en las principales crisis, tales como la ambiental, alimentaria, económico/financiera, etc., a la que se suma la pandemia del CODIV-19 y otras, bien puede abrir paso a propuestas como la que esbozamos en este escrito que, además y cada vez más, van ganando terreno. De estar reducido a trincheras en comunidades con pequeños agricultores, ahora se ve explicitado de manera formal en la declaración de los derechos de los pueblos indígenas en el ámbito de la ONU y en el acuerdo mundial por cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible al 2030, entre los que destaca el ODS-12 dirigido a garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles. En torno a lo cual resulta esencial el cuidado y renovación de la Naturaleza, así como la producción de mercancías que cubran las fundamentales necesidades sinérgicas del Ser Humano, existenciales y axiológicas

    Frente a este panorama desolador, la alternativa es impulsar en el mediano y largo plazo un Modelo de Decrecimiento Sostenible Asimétrico (MDSA), que lo hemos sostenido antes[27] y que consiste en:

    1. ir contra el paradigma ideológico del neoliberalismo extractivista-exportador-depredador, que va contra los bosques, el agua, la biodiversidad y los pueblos;
    2. dejar los bosques en pie con moratoria de concesiones de por el menos 20 años y combustibles fósiles en el subsuelo AHORA;
    3. cuestionar y proponer alternativas a las formas de acumulación, producción, consumo y energía, vigentes;
    4. el autocentramiento con control local de la fuerza de trabajo, excedentes, mercado interno, recursos naturales y tecnologías.

    Varios economistas, sociólogos, politólogos y movimientos sociales de nuestro continente han adherido al MDSA. Los partidarios de la ideología neoliberal extractivista – tipo Milei y Bukele – plantean el crecimiento infinito, la economía verde y circular, la “vuelta a la normalidad” a lo Foro Económico Mundial y el “chorreo”. Los líderes de izquierda, del progresismo y la centro izquierda, con variantes, siguen en lo mismo: para estos sectores – peor con la ultraderecha -, el destino del planeta los tiene sin cuidado: no rinde frutos electorales¡!

    Remando contra la corriente, sostengo nuevamente junto con cientos de académicos y movimientos sociales – principalmente en Europa, América del Norte y Japón – sobre la necesidad de impulsar en nuestro país y el planeta un Decrecimiento Sostenible Asimétrico DSA para salvarnos todos y todas. Los gobiernos y sociedades de América Latina, el Caribe, Norte América, África toda, el Medio Oriente, China, India y el Sudeste Asiático, están más preocupados por atender guerras fraticidas y seguir creciendo infinitamente, supuestamente para superar la pobreza y la discriminación, con democracias precarias y excluyentes, que proteger y usar adecuadamente los bienes comunes del planeta, sobre todo los bosques, el agua, los mares y la energía.

    Al respecto, Alberto Acosta sostiene que: “A pesar de ser insostenible el crecimiento económico permanente en un mundo con límites biofísicos inocultables, esta verdadera cacotopía mantiene su vigor y su vigencia … El crecimiento económico se ha convertido en un camino sin salida. Es más, no basta una economía estacionaria. El decrecimiento —sobre todo para mu­chas economías opulentas— aparece como una urgencia insoslayable” comentario del libro “Decrecimiento: un vocabulario para una nueva era” publicado en el 2015[28].

    Los “decrecientistas” son cientos

    Para ello, nuevamente me auxilio de las reflexiones “decrecientistas” del economista ecuatoriano Alberto Acosta para insistir en un tema que debería ser parte del debate programático actual en el Perú y el mundo: si no queremos desaparecer como especie y como planeta, no podemos seguir creciendo ad infinutum. También me auxilio del economista peruano Jürgen Schuldt quien, en un libro liminar sobre el tema, publicado hace 12 años titulado “Desarrollo a escala humana y de la naturaleza”[29], le añade a la tesis del decrecimiento sostenible el concepto y palabra “asimétrico”. Ello en razón de que los debates de las últimas tres décadas sobre este tema han sido básicamente entre economistas y movimientos sociales de los países “desarrollados”, que tienen recursos económicos, financieros e institucionales acumulados como para transitar hacia una economía y sociedad de este tipo.

    Los inspiradores de Shuldt

    Para plantear salidas y políticas posibles, Schuldt se inspira en los modelos de Herman Daly sobre capacidad de carga del planeta, en los 10 límites de nuestra Casa Común – cambio climático, tasa de pérdida de biodiversidad, ciclo del nitrógeno, ciclo del fósforo, agotamiento del ozono estratosférico, carga ácida de los océanos, uso global del agua fresca, cambio en el uso de tierras, carga atmosférica de aerosol y polución química – descritos por los economistas Manfred Max-Neef y Philip Smith en el Desarrollo a Escala Humana, parte de citar al economista y ecologista francés Serge Latounche, célebre ideólogo y partidario del decrecimiento.[30]

    Shuldt también se inspira en el economista rumano Nicholas Georgescu-Roegen a quien Joseph Shumpeter – el autor de “Teoría del desenvolvimiento económico”, lo convirtió en economista -, quien había sido miembro del Club de Roma que publicó en 1970 Los límites del crecimiento, pero luego, al no adoptar una postura política definida contra el crecimiento y por la forma elitista y tecnocrática del Club de intentar monitorear y guiar la realidad social global mediante la construcción de numerosas simulaciones neoclásicas abstractas de computadora, de la economía mundial, se retiró y propuso un “Programa Bioeconómico Mínimo (PBM)”, inspirado en el precursor de estos planteamientos, André Gorz, seudónimo del filósofo y periodista franco-austriaco llamado Gerhart Hirsch, fallecido en el 2007, quien en 1991 ya escribía sobre el  “decrecimiento de la economía para una sociedad de subsistencia moderna”[31].

    En el libro citado, el profesor Shuldt sostiene que: Para evitar malentendidos es necesario aclarar que (el DSA) no implica una reducción de la producción en todos los sectores económicos y/o de todas las economías, sino que se trataría de un esquema de decrecimiento sostenible y selectivo dirigido fundamentalmente en contra de los que más materia y energía consumen. En cambio, las ramas económicas y los países que sí podrían estar creciendo son los más pobres que (aún) usan poca materia-energía (o se comprometan a usar menos), siempre y cuando estén dirigidos a cubrir las necesidades axiológicas de las personas (a lo Max-Neef) y, con ellas, a expandir sus capacidades y realizaciones (a lo Amartya Sen)”. Shuldt añade que: “Según ese paradigma, se trataría de implementar un DSA en un doble sentido: de una parte, favoreciendo la producción de las relativamente “sostenibles” ramas productivas (o productos específicos) en contra de las más intensivas en términos de los flujos de energía y materia que insumen; y, de la otra, forzando a un esfuerzo de reducción mayor de la huella ecológica en los países del Norte”.

    Desde el lado de la oferta, Shuldt inspirándose en Georgescu Roegan, propone 8 medidas concretas de políticas a impulsar y por el lado de la demanda 3 medidas, pero la principa1de todas es el célebre slogan del Mahatma Ghandi: “Vive simple, para que otros puedan simplemente vivir”. El planteamiento sobre el DSA también está en un artículo que escribiéramos con Schuldt en el 2021 para el libro “Post desarrollo: contexto, contradicciones futuro”[32].

    Desde Cataluña Joan Martínez Alier y la canadiense Naomi Klein

    Por su parte, el economista y ecologista catalán Joan Martínez Alier ya desde el 2002 se adhería a estas tesis publicando El ecologismo de los pobres: Conflictos ambientales un lenguaje de valoración. A su turno, Naomi Klein con su libro Esto lo cambia todo: El capitalismo contra el clima publicado en inglés el 2014 y español el 2020 [33] escribe sobre “Cultivar la economía humana, achicar inhumana” (páginas 124 a 126) en la que, citando a decenas de climatólogos, economistas y académicos de diversos países, aboga por el “decrecimiento selectivo” Pero hay muchos más en el viejo continente y norte América, quienes junto con movimientos sociales abogan por esta tesis.

    Varios economistas, sociólogos, politólogos y movimientos sociales de nuestro continente han adherido al DSA, mientras que los partidarios de la ideología neoliberal extractivista – tipo Milei y Bukele – que plantean el crecimiento infinito, la economía verde, la circular, la “vuelta a la normalidad” a lo Foro Económico Mundial y el planeamiento del “chorreo”, siguen sueltos en plaza, incluyendo líderes de izquierda, del progresismo y la centro izquierda. Para estos sectores – peor con la ultraderecha -, el destino del planeta los tiene sin cuidado.

    Pero hay otros y otras que están en la orilla opuesta, como Eduardo Gudynas, Alberto Acosta, Raúl Zibechi, Maristella Svampa, Paola Arias, Arturo Escobar, Gustavo Esteva, Ruth Lozano, otras y otros citados en el libro, Decrecimiento: un vocabulario para una nueva era, citado más arriba, publicado por Icaria y la Fundación Heinrich Boell en 2015, en el que los editores recopilan artículos de 100 autores de varios continentes sobre este tema[34]  Recientemente, en octubre del 2023, se publicó Más allá del colonialismo verde Justicia global y geopolítica de las transiciones ecosociales, artículos editados compilados por Miriam Lang, Breno Bringel y Mary Ann Manahan.[35]

    También se ha publicado el libro del joven economista japonés Kohei Saito, titulado El Capital en la era del antropoceno en el que sostiene, revisando y rescatando las tesis del Viejo de Renania Carlos Marx, que: Una cosa que hemos aprendido durante la pandemia es que podemos cambiar drásticamente nuestra forma de vida de la noche a la mañana: desde la forma en que comenzamos a trabajar desde casa, compramos menos cosas, volamos y comemos menos. Hemos demostramos que trabajar menos es más amigable con el medio ambiente y brinda a las personas una vida mejor. Pero ahora el capitalismo está tratando de devolvernos a una forma de vida ‘normal’”.[36]

    Este libro se convirtió en un éxito de ventas inesperado en Japón, vendiendo más de 250,000 copias para mayo de 2021 y las cifras de ventas aumentaron a más de 500,000 a mediados del 2022. Por su lado, Thomas Piketty, Jefrey Sachs y la CEPAL, con énfasis particulares, abogan por esta tesis del decrecimiento desde hace algunos años. No podemos ni debemos continuar alegremente aceptando y promoviendo el capitalismo depredador echando por los suelos las 7 funciones del Bioma Andino-Amazónico, los 15 mitos del extractivismo depredador y las 17 contradicciones que describe David Harvey. Debemos pensar y actuar fuera de la caja de la propuesta ideológica neoliberal en curso desde hace al menos 30 años en nuestro país.


    [1] Economista peruano, ex asesor parlamentario, ex vice ministro de recursos naturales del Ministerio del Ambiente MINAM, investigador del IDPA, activista del FOSPA y militante socialista.

    [2] Ver: file:///C:/Users/user/Downloads/Plan_de_Gobierno_de_Izquierda_Unida_1990.pdf.

    [3] Ver: Ver: https://apisije-e.jne.gob.pe/TRAMITE/ESCRITO/1996/ARCHIVO/FIRMADO/8630.PDF.

    [4] Ver: https://www.encuentroperu.org/plandegobierno_ganaperu_2011-2016.pdf.

    [5] Ver: https://apisije-e.jne.gob.pe/TRAMITE/ESCRITO/1996/ARCHIVO/FIRMADO/8630.PDF. No considero de izquierda el llamado Plan de Gobierno de Perú Libre …. Marxista Leninista.

    [6] Ver mi escrito: “PBC-E, Amazonía y alternativas”. También ver mi artículo “La pandemia 5G y las 5 funciones andino-amazónicas” publicado por ALAI  en: https://www.alainet.org/es/articulo/207456-.  .

    [7] Ver el vídeo “¿Por qué defendemos la Amazonía?” en: https://m.youtube.com/watch?v=_mO1bf8iTMI.

    [8] Ver: https://www.servindi.org/actualidad/5950.

    [9] Ver: https://cendoc.caaap.org.pe/cgi-bin/koha/opac-detail.pl?biblionumber=3847&shelfbrowse_itemnumber=4950.

    [10] Ver mi escrito “Los 10 jinetes y el desarrollo sostenible asimétrico” en Amauta Nro. 11, set 2023.

    [11] Ver mi texto con Jürgen Shuldt “Perú pandémico: hacia un nuevo pacto social con propuestas desde abajo, adentro y el común” en: Posdesarrollo Contexto, contradicciones y futuros; Alberto Acosta, Pascual García, Ronaldo Munck (Editores); Ediciones Abya-Yala, Quito 2021. En: https://www.researchgate.net/profile/Ronaldo-Munck/publication/357512145_POSDESARROLLO_digital/links/61d1903ad45006081683e058/POSDESARROLLO-digital.pdf

    [12] Ver: https://proloquios.com/2023/10/25/onu-alerta-sobre-seis-puntos-de-inflexion-para-el-planeta/.

    [13] Ver: https://elpais.com/america-futura/2023-07-10/carlos-nobre-el-potencial-economico-de-los-bosques-en-pie-en-la-amazonia-es-mayor-a-la-agricultura.html

    [14] Ver: 15 Mitos y Realidades de la minería transnacional en Argentina. Guía para desmontar el imaginario prominero; Colectivo Voces De Alerta; varios autores; Argentina, 2011 en: https://biblioteca.clacso.edu.ar/Argentina/iigg-uba/20161025033400/15mitos.pdf.

    [15] Ver: https://www.icmm.com/es/miembros-del-icmm/principios-mineros.

    [16] Ver: https://www.ohchr.org/sites/default/files/Documents/Publications/GuidingPrinciplesBusinessHR_SP.pdf.

    [17] Ver: https://mneguidelines.oecd.org/Guia-de-la-OCDE-de-debida-diligencia-para-una-conducta-empresarial-responsable.pdf.

    [18] Ver: file:///C:/Users/user/Downloads/CCCMC_Guidelines_for_Social_Resposibility_in_Outbound_Mining_Investments_Oct_2014_ES.pdf

    [19] Ver: Diecisiete contradicciones y el fin del capitalismo de David Harvey, traducido por Juan Mari Madariaga; Instituto de Altos Estudios Nacionales del Ecuador IAEN, Quito, Ecuador, 2014. En:  https://www.traficantes.net/sites/default/files/pdfs/Diecisiete%20contradicciones%20-%20Traficantes%20de%20Sueños.pdf

    [20] Ver Hugo Cabieses en: https://brecha.com.uy/del-caos-destituyente-al-ciclo-constituyente/.

    [21] Ver Hugo Cabieses en: https://www.alainet.org/es/articulo/191007

    [22] Ver Gastón Acurio en : https://elcomercio.pe/economia/negocios/acurio-reto-gastronomia-peruana-proximos-15-anos-noticia-669801-noticia/

    [23] Ver una crítica a los 10 principio en: https://www.alainet.org/es/articulo/169159.

    [24] Ver artículo de Hugo Cabieses en: ver: https://www.alainet.org/es/active/74002.

    [25] Ver: http://blog.pucp.edu.pe/blog/wp-content/uploads/sites/156/2014/07/jorge_basadre_-_la_promesa_de_la_vida_peruana.pdf

    [26] Ver al respecto: https://www.alainet.org/es/articulo/188382

    [27] Ver mi escrito “Laudate Deum, cambio climático y el decrecimiento sostenible asimétrico – DSA” en Otra Mirada: https://otramirada.pe/sites/default/files/Laudate%20Deum.HugoCabieses.pdf.

    [28] Libro que recopila artículos y comentarios de cerca de 100 autores de varios continentes sobre el decrecimiento (https://mx.boell.org/sites/default/files/decrecimiento_edicion_mexico.pdf)

    [29] Ver: https://repositorio.up.edu.pe/bitstream/handle/11354/2685/SchuldtJurgen2012.pdf)

    [30] Ver: Decrecimiento en el norte y antiextractivismo en el sur en: file:///C:/Users/user/Downloads/Serge%20Latouche%20-%20Decrecimiento%20en%20el%20norte%20y%20antiextractivismo%20en%20el%20sur%20-%20traduccio%CC%81n%20(1).pdf).

    [31] Ver Capitalismo, socialismo, ecología; también ver su azarosa biografía y el homenaje a André Gorz y Michel Bosquet su compañero de militancia ecológica que le hacen en la revista Ecología Política en: https://www.ecologiapolitica.info/andre-gorz-michel-bosquet-precursor-de-la-ecologia-politica/

    [32] Ver: file:///C:/Users/user/Downloads/POSDESARROLLOdigital%20(4).pdf)

    [33] Ver: https://www.solidaridadobrera.org/ateneo_nacho/libros/Naomi%20Klein%20-%20Esto%20lo%20cambia%20todo.pdf)

    [34] Ver: https://mx.boell.org/sites/default/files/decrecimiento_edicion_mexico.pdf.

    [35] Ver: https://biblioteca-repositorio.clacso.edu.ar/bitstream/CLACSO/249068/1/Mas-alla-colonialismo.pdf.

    [36] Ver: https://revistaeconomiacritica.org/index.php/rec/article/view/655/580)